El duelo entre Lionel Messi y Cristiano Ronaldo fue el más esperado del amistoso entre la Argentina y Portugal. Las estrellas cumplieron con su parte, aunque no tuvieron el brillo que acostumbran a mostrar en Barcelona y Real Madrid.
La Pulga Messi arrancó el partido parado de nueve, comenzando sus jugadas por la izquierda. Encontró en Di María su socio principal en esos primeros instantes del partido pero, a medida que pasaron los minutos, se fue disolviendo. El portugués fue de menor a mayor, pero siempre fue la carta ofensiva más importantes del conjunto Luso.
Los primeros suspiros se los llevó Messi, cuando a los seis minutos cabeceó dentro del área y la pelota salió muy cerca del arco de Eduardo. Siete minutos más tarde la Pulga comenzó de la izquierda al medio y dio una asistencia perfecta a Di María, que abrió el marcador.
Tras el gol Messi se fue tirando atrás y Cristiano Ronaldo fue tomando más protagonismo. A los 20 minutos llegó el gol de Portugal. El crack de Real Madrid aprovechó una defensa que marcó mal y se anticipó a la salida de Romero para sellar el empate.
Las mejores jugadas de Portugal llegaron cuando se conectaron Cristiano Ronaldo, Nanni y Almeida. A Messi le faltaron socios en el ataque. Más allá de Di María, no logró lo mismo con Lavezzi, el tercer delantero.
En el segundo tiempo Ronaldo duró poco. Fue remplazado a los quince minutos, pero antes tuvo dos muy claras para marcar. En la primera lo asistió a Almeida que se perdió el gol abajo del arco y luego la perdió él cuando aprovechó un rebote y la pelota se fue desviada.
Messi en cambio jugó los 90 minutos. En el segundo tiempo Lio se fue parando más atrás, comenzando las jugadas casi con los dos centrales.
Fue el más desequilibrante de mitad de cancha hacia adelante y a cinco minutos del final asistió a Pastore que estrelló su cabezazo en el travesaño. En el final del partido selló con su zurda la victoria de la Selección, al igual que en el partido con Brasil, aunque esta vez de penal eligiendo la derecha del arquero Rui Patricio.
La Pulga Messi arrancó el partido parado de nueve, comenzando sus jugadas por la izquierda. Encontró en Di María su socio principal en esos primeros instantes del partido pero, a medida que pasaron los minutos, se fue disolviendo. El portugués fue de menor a mayor, pero siempre fue la carta ofensiva más importantes del conjunto Luso.
Los primeros suspiros se los llevó Messi, cuando a los seis minutos cabeceó dentro del área y la pelota salió muy cerca del arco de Eduardo. Siete minutos más tarde la Pulga comenzó de la izquierda al medio y dio una asistencia perfecta a Di María, que abrió el marcador.
Tras el gol Messi se fue tirando atrás y Cristiano Ronaldo fue tomando más protagonismo. A los 20 minutos llegó el gol de Portugal. El crack de Real Madrid aprovechó una defensa que marcó mal y se anticipó a la salida de Romero para sellar el empate.
Las mejores jugadas de Portugal llegaron cuando se conectaron Cristiano Ronaldo, Nanni y Almeida. A Messi le faltaron socios en el ataque. Más allá de Di María, no logró lo mismo con Lavezzi, el tercer delantero.
En el segundo tiempo Ronaldo duró poco. Fue remplazado a los quince minutos, pero antes tuvo dos muy claras para marcar. En la primera lo asistió a Almeida que se perdió el gol abajo del arco y luego la perdió él cuando aprovechó un rebote y la pelota se fue desviada.
Messi en cambio jugó los 90 minutos. En el segundo tiempo Lio se fue parando más atrás, comenzando las jugadas casi con los dos centrales.
Fue el más desequilibrante de mitad de cancha hacia adelante y a cinco minutos del final asistió a Pastore que estrelló su cabezazo en el travesaño. En el final del partido selló con su zurda la victoria de la Selección, al igual que en el partido con Brasil, aunque esta vez de penal eligiendo la derecha del arquero Rui Patricio.
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