El párroco Roberto Ramos Cortes dijo que Luis era un muchacho a quien se le veía con miras de vocación a ser sacerdote
Ciudad Juárez, Chihuahua.- Los 14 jóvenes victimados en la colonia Horizontes del Sur y los 19 lesionados no eran delincuentes, incluso uno de ellos aspiraba a ser sacerdote, pero lo mataron junto con su hermano de solamente 13 años de edad, por lo que su familia exige justicia.
Este lunes en la mañana fue el funeral de cuatro de las víctimas del multihomicidio en la vivienda de Horizontes del sur, en presencia de familiares y amigos de los jóvenes a los que el Obispo de Ciudad Juárez, Renato Ascencio León ofició la misa de cuerpo presente.
Esta ceremonia fue en la iglesia El Señor de los Milagros, donde hay ya 4 cuerpos, dos pares de hermanos, y posteriormente llevaron dos más en la tarde.
Posterior a la ceremonia, trasladaron los cuerpos al panteón San Rafael y dos más se los llevarán al panteón Jardines del Recuerdo.
La Iglesia Católica calificó de irracional la ejecución de 14 jovencitos a manos del crimen organizado, “estos sujetos ya nomás matan por matar”, por tal motivo el Vicario de la Diócesis de Ciudad Juárez, Oscar René Blanco Vega, hizo un exhorto a todos los feligreses y a los grupos cristianos a unirse para luchar por la paz, por defender la vida humana.
Hoy la comunidad juarense, políticos panistas, perredistas y algunos priístas, junto con sacerdotes, empresarios de todas las cámaras y representantes de Organizaciones no Gubernamentales le exigen a los gobiernos de los tres niveles que pongan un alto a este tipo de masacres en las que pagan culpas gente inocente.
La mamá de los jóvenes, quien solamente quiso que se le identifique como la señora Austreberta y que era originaria del estado de Michoacán, expresó que su niño, Luis Alberto Vital de 17 años de edad, una de las víctimas del multihomicidio, era coordinador de catecismo y además integrante fundador del grupo de danzantes (matachines) de la parroquia Señor de los Milagros y aspiraba a ser sacerdote.
Sus cuerpos fueron recogidos por la familia la tarde del domingo en el Servicio Médico Forense y trasladado a la iglesia donde se realizó el funeral.
Con los ojos enrojecidos por derramar tantas lágrimas, con la cara demacrada y el rictus de dolor, la señora Austreberta dice en voz baja, que se le quiebra por el dolor, “me mataron a dos de mis hijos, eran buenas personas y no le hacían daño a nadie”.
Sobre los homicidas se expresa con indignación: “esa gente son unos animales que no tienen corazón y que me dejaron a mis hijos así, las autoridades no van a hacer nada porque a cada rato está pasando eso y no han hecho nada”.
“Quiero justicia por mis hijos, mis dos hijos, ¿cuándo la voy encontrar? Los responsables tienen corazón de piedra”, expresó la humilde mujer mientras secaba las lágrimas de sus ojos.
El párroco Roberto Ramos Cortes dijo que Luis era un muchacho a quien se le veía con miras de vocación a ser sacerdote e incluso ya habían hablado de que el próximo año entraría a estudiar al seminario.
Mencionó que este tenía tres años en las confirmaciones y el último año era el coordinador, además de que participaba en el grupo de danza y en la pastoral juvenil. “estuvieron en las circunstancias no debidas porque eran muchachos sanos y que están entregados al Señor y trabajan por la promoción de los demás jóvenes”.
Los dos cuerpos serán trasladados a Michoacán por sus familiares, donde les darán sepultura, se informó ayer por la noche.
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